miércoles, 27 de agosto de 2008

Elucubraciones

Exploro emocionada espacios extraños, especialmente el enigma existencial, elixir embriagador. Entonces, enredada en ecuaciones excesivamente elípticas, enseguida emerge el espanto —¡enigma encubierto!—. Efectivamente, es elucidación extenuante. Encuentro en esto esperanza estéril, entristezco.
Empero existo. Es encomiable.